el sentido del oído

Muchos ciegos, valiéndose sólo de los oídos, pueden detectar obstáculos como muros o postes sin necesidad de tocarlos.

El aliado indispensable

Para entender esto, hablaremos muy brevemente sobre los murciélagos, quienes practican este sistema pero de forma mucho más desarrollada. Estos animales pueden volar y cazar a sus presas en la más completa oscuridad. Para que esto sea posible, se desplazan emitiendo ultrasonidos, cuyas ondas, al dispersarse chocan en los objetos que están en su entorno y regresan al murciélago como un eco. Los murciélagos sienten estos sonidos-reflejos o ecos, y así perciben auditivamente a los objetos o a sus presas. Este sistema para detectar auditivamente a los objetos se llama ecolocación, es decir , localización por el eco. Gracias a la ecolocación, los murciélagos pueden saber qué cosas hay en su camino y pueden detectar hasta los insectos más pequeños.
Es obvio que el hombre no posee la magistral habilidad auditiva de los murciélagos; sin embargo, un ciego y también un vidente entrenado pueden detectar muros, postes u otros obstáculos parecidos a más de tres metros de distancia. Para lograrlo, pueden producir ruidos o sonidos, ya sea golpeando los muslos con las manos, zapateando, o golpeando consecutivamente el bastón contra el suelo. De la misma manera el sonido se expande y choca con el objeto, produciéndose un pequeño eco que regresa a los oídos, esto les permite a los ciegos detectar los obstáculos y hacer maniobras para esquivarlos; de ahí que se pueda decir que en cierto modo, es posible ver con los oídos. Finalmente, diremos que esta habilidad parece desarrollarse más en los ciegos de nacimiento y en los que han perdido la vista a temprana edad.

La estimulación auditiva

La audición es el segundo sentido en importancia para el deficiente visual o ciego. A través de él le llega el lenguaje, puede diferenciar personas, animales y objetos.

  • Cualquier grado de audición es valioso y digno de ser desarrollado lo antes posible.

  • La primera experiencia sonora de un niño será la voz de su madre, este será el signo mas palpable de su presencia. Por medio de ella, la madre, contribuirá al adiestramiento del oído, haciéndose necesario que la madre le cuente cosas, le cante, etc

  • Cuanto más rico sea el estimulo de las voces humanas, mas significado obtendrá el niño de las variaciones en la calidad.

  • El hecho de tener una audición acritica o poseerla critica ante una amalgama de sonidos, posibilitara al niño con un potencial sensible que le capacitara para relacionarse mejor con un mundo coherente de imagen y lleno de múltiples estímulos sonoros.

  • Podemos hacer ejercicios desde la palmada de mano, el taconeo, el balanceo rítmico de los brazos, entre otros hasta accionar diversos instrumentos de percusión.