Con el transcurso del siglo XIX este tipo de alimentación se fue empobreciendo, y con la llegada del siglo XX la gastronomía de unia típca casa argentina, era considerada aburrida, monótona, los platos se resumían, entre otros en carne asada, pucheros y casi nada más.

Las excepciones eran algunos toques afrancesados en las clases urbanas más acomodadas, en la sociedad rural y el interior. No nos olvidamos de algunos platos típicos de la época, como las empanadas, humitas y pastelillos.

Con la llegada de inmigrantes a principios del siglo XX, los hábitos comenzaron a cambiar; y se dio lugar a la nueva comida Argentina, sobre todo porteña.

Fue fundamental el papel de los inmigrantes provenientes de Italia, que no sólo trajeron platos y recetas, sino hábitos sociales vinculados con el comer, imponiendo también el culto al aperitivo.

Hoy en día seguimos con las mismas costumbres, las pastas y las pizzas son indiscutiblemente un plato en la dieta diaria.

Un paseo desde los pastelitos de membrillo de princpios de siglo XIX, pasando por las costumbres "importadas" de otros países, hasta la moderna comida rápida.