Ajos
Se consumen sus "dientes", es muy habitual en diversos platos. Generalmente se los aprovecha secos o semisecos, como ajo deshidratado, verdes y en encurtidos.
Se consumen sus "dientes", es muy habitual en diversos platos. Generalmente se los aprovecha secos o semisecos, como ajo deshidratado, verdes y en encurtidos.
Sus apreciadas cualidades nutricionales lo hacen uno de los alimentos más consumidos de nuestra gastronomía, siendo múltiples sus utilidades culinarias.
Hortaliza muy apreciada por su sabor agradable, que puede ser consumida cocida o cruda en infinitas preparaciones culinarias, teniendo excelentes propiedades nutritivas.
Se consume en ensaladas, acompañando tomate, zanahoria u otras hortalizas. También se la puede aprovechar como relleno de tartas y para decorar platos de fiambres.
Se consume su fruto crudo, cocido o en diferentes preparaciones (encurtidos, al natural, pimentón, ají molido, deshidratado).
Los ajos son de suelos arenosos-arcillosos-calcáreos, fértiles, permeables y trabajados profundamente con mucha anticipación a la siembra. En suelos húmedos los bulbos se pudren.
El tomate es un cultivo poco exigente en cuanto a la calidad de los suelos y tolerante a la presencia de sales y acidez. No obstante, el estado de germinación y plántula son los períodos de mayor susceptibilidad a estos factores. Esta planta responde muy bien en suelos con alto contenido en materia orgánica.
La época de siembra es la primavera temprana y verano temprano. La siembra se efectúa "de asientos": 4 a 5 gr de semilla por cada 4 metros de surco, a una profundidad de aproximadamente 6 a 7 mm, tapando las semillas con una ligera cubierta de suelo y paja triturada, aserrín o mezcla de aserrín, paja y estiércol estabilizado, cuyo objeto es mantener la humedad de la tierra –en este caso referida a la zanahoria, pero que lo podemos extender a otras especies-.
Todo el año, debiendo evitarse su cultivo en los meses más calurosos del verano y también en aquellos de mayor rigor invernal. La siembra es directa a chorrillo (con raleo), con una distancia entre líneas de 40 cm, utilizando 2 a 3 gramos de semilla cada 10 m2. lineales.
Debido a las bajas temperaturas que se registran en Julio y Agosto, los almácigos deben ser protegidos con reparos o coberturas. Normalmente los almácigos se hacen mediante macetitas de polietileno negro.