Históricamente, el cuentakilómetros está considerado como uno de los componentes de más importancia en un auto, debiendo estar siempre en el mejor de los estados y con un correcto funcionamiento para que nos sea útil como tal. De hecho, el cuentakilómetros es el encargado de transmitirle al conductor toda la información que va emanando el auto (velocidad, estado del combustible, etc.).

El cuentakilómetros posee una gran cantidad de esferas entre las que destaca el velocímetro (que señala la velocidad por hora a la que se está desplazando el auto) y el tacómetro (que indica las revoluciones por minuto). También es posible encontrar cuentakilómetros más modernos en formato digital que sustituyen por ese formato las tradicionales esferas.

Una tradición en tuning

Al momento de aplicar cualquier tendencia dentro del tuning a un auto, hay que tener en cuenta cuáles son los elementos del cuentakilómetros que pueden ser modificados. Dichos elementos son los siguientes: las agujas, la iluminación que señala a las esferas y a las agujas, el color que tienen las esferas en el interior y, finalmente, la parte del frente que bordea a las propias esferas.

Hay que ser especialmente cuidadoso con el tuning sobre el cuentakilómetros ya que cualquier cambio en sus elementos puede modificar un cambio en las mediciones por lo que el elemento, tal como salió de fábrica, deja de ser útil para los objetivos por los que fue creado. Los cuentakilómetros en la actualidad se dividen en digitales, electrónicos y mecánicos. El cuentakilómetros posee una gran cantidad de esferas entre las que destaca el velocímetro (que señala la velocidad por hora a la que se está desplazando el auto) y el tacómetro (que indica las revoluciones por minuto). También es posible encontrar cuentakilómetros más modernos en formato digital que sustituyen por ese formato las tradicionales esferas.