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ANECDOTAS
En esta sección publicamos las anécdotas recolectadas mediante mail que ustedes nos mandan.












Juan, 40 años, de San Miguel:


Era una tarde que hacía mucho calor y yo había tomado el 176 en San Miguel y me dirigía hacia Chacarita. Mientras viajaba subió un vendedor con un producto que según Él, le sacaba todas las manchas hasta las más difíciles. Empezó diciendo que se iba a manchar la camisa con tinta, luego se la saco con ese producto extraño, pero lo más gracioso fue cuando saco grasa de la puerta de la unidad y se mancho la camisa, porque se pasaba el producto una y otra vez y no salía a todo esto la gente se empezó a reír y tuvo que pedir al chofer que lo bajara en la próxima parada.

Roxana, 35 años, de San Isidro:


A mis 18 se usaban los taco aguja (lla-
mados ahora stiletto) y las polleras TUBO. Iba yo en el bondi muy contenta sentada en el último asiento (el largo de atrás) con mi walkman clavado en las orejas cuando de repente el bondi pegó ESA frenada feroz. La pollera tubo era forrada con una tela tipo raso, la que sumada a mis medias can can y los tacos stiletto indominables hicieron que el efecto patito fuera terrible y salí despedida cual saeta hacia adelante. Aparecí sentada en el medio del pasi-
llo, con los tacos rotos y la pollera de collar. Obvio que me paré, me acomo-
dé la ropita y los pelos y me bajé en la parada sin perder NUNCA el glamour.
Si queres que tu anécdota este publicada contactate con nosotros, mandanos un mensaje con el asunto “anécdota” con tu nombre, edad y lugar donde vivís más tu historia y nosotros la publicamos en la página.

Micaela, 32 años, de San Telmo


Una vez me afanaron antes de que llegase el bondi (10 segundos antes, por lo q lo veía venir) y cuando subí le dije al chofer q me habían afanado y bajo un tipo con un chumbo a correr a los chorros, jaajajaaj, también en ese momento me dio impresión, pero después me dio gracia.... lo esperamos (el colectivo paro) como 10 minutos para ver si volvía, pero no...

Pablo, 20 años, de Palermo


Otra vez venia en el bondi sentado en los asientitos de a 2... Pero solo... y había un montón de asientos libres y se sube una señora mayor con un par de bolsas y me pide permiso... se me sienta al lado... al ratito empezó a hablarme... después me empezó a contar cosas de su vida... yo a todo esto le decía... sisisi... y no le daba ni bola... hasta que me empezó a contar que se le había muerto el esposo... que el hijo no la iba a ver nunca... y se puso a llorar a los gritos en el bondi.. La gente me miraba como diciendo... que le hiciste?.. Y yo no sabía dónde meterme.. Hasta que le digo.. Señora.. Me tengo que bajar.. Y me dice.. No.. Quedate conmigo.. Estoy triste.. Y me agarraba la mano.. Y yo me quería bajar.. Y le dije.. Nono.. Y me fui bien rápido... la verdad que me asusto mucho esa señora.