Desde diciembre de 2008 los trabajadores de Indugraf permanecen en la planta en resguardo de las instalaciones que la patronal abandonó, dejando una importante deuda por salarios atrasados y aportes jubilatorios impagos.

Los trabajadores han realizado innumerables acciones de movilización y difusión del conflicto, reclamando al Estado que garantice la continuidad de los puestos de trabajo, y ya han logrado obtener la matrícula de la Cooperativa de Trabajo Gráfica Loria para poder seguir produciendo bajo la autogestión.

¡Ni una familia en la calle, ni un libro menos, ni una fábrica cerrada!