En el mundo real el volumen es algo sencillo de comprender pues se relaciona claramente con aquella masa u objeto que ocupa un lugar en el espacio y que presenta una característica que lo define: su tridimensionalidad -es decir, que presenta altura, anchura y profundidad-. Si embargo, el volumen es algo más: es la percepción personal e intransferible del mundo que vivimos y que es posible desarrollar expresivamente en la educación visual y plástica.
En definitiva, toda nuestra comprensión del volumen y del espacio proviene de nuestras experiencias , y de ellas, las más importantes, son las de nuestra infancia.